Vi tu luna,
reflejada en la arena de tu playa.
Navegaba presta,
tras la ufana ola del recuerdo.
Bajó tu estrella,
flotando sobre la pálida nube.
Esperaba presta
el susurro de una mirada.
Vi tu luna,
menguar en el horizonte de tu playa.
Viajaba presta,
escondida tras la muralla.
Percibí tu estrella,
fugaz reflejo de tu morada.
Esperaba inquieta,
a que le lavaras la cara.
Soñé con ella,
con esa luna
y con esa estrella.
Y en ese instante…
sucumbió.
Marchó la ola,
desapareció la nube
y tu luna…
dejó de menguar.
Mensaje: Durante el camino de transformación, nos vamos haciendo conscientes de la dimensionalidad del Ser Humano.
La percepción de nosotros como cuerpo y mente, se torna obsoleta, cuando das con el espíritu.
