Nº 54 - Ciega

Me pregunto
¿en qué estriba mi ceguera?
Esa percepción ausente,
que endurece mi mirada
al carecer de un soporte inherente,
ocultando la mañana.
Ciega, si soy ciega.
Ciega de orgullo que amarga,
lo más profundo de mi alma.
Cedo a la estúpida lucha,
que combate con su espada,
que luce pero no vence
la ceguera de mi mirada.
Extirpo de raíz,
aquella muralla basta.
Aquella coraza estática
que desvirtúa mi mirada.
Creo percibir, por fin tu canto,
es una melodía sólida,
que despierta todo encanto
y devuelve el brillo
a la mía, tu mirada.
Ahora, puedo percibir tu luz.
Ciega.
Aún hoy recuerdo,
mi estúpida ceguera.



Mensaje: Retirar los velos que cubren la luz de tus ojos, es lo más sabio y elevado que puedes hacer por ti mism@. ¿Dónde estriba tu ceguera? Háblale a un espejo. Si te lo permites, te responderá arrancándote el primer velo. Suerte.